Por lo anterior, cuando
compites con otros, debes esperar el mejor desempeño de los demás, ellos
también merecen ganar, también se han preparado y son tan capaces y lo merecen
tanto como tú.
Entonces, cuando
compitas con otros por algo (por un trabajo, en un evento deportivo, por un
premio) debes prepararte lo suficiente y un poco más, si es que quieres tener
alguna oportunidad. Es un hecho, si quieres ganar, sobresalir y diferenciarte
debes dar un poco más, esforzarte un poco más.
Los exitosos
siempre esperan lo mejor de los demás, y por eso se preparan de la mejor manera
posible. Si quieres ser exitoso, debes meterte en la cabeza que mientras tu
duermes o ves televisión los demás se están preparando.
Como esperas lo
mejor de los otros te exigirás un poco más, darás un poco más, y abandonaras el
conformismo, alejando la idea de que lo único que te puede ayudar a ganar es un
golpe de suerte.
Las personas
competitivas entienden que la competencia es fuerte y esperan lo mejor de los demás,
por lo que se preparan dando lo máximo posible.