Mucho se habla de la capacidad que tienen los niños de
maravillarse de todo lo que los rodea. Ellos se pueden entretener con una
piedra que encuentran a su paso y hasta pueden inventar mundos nuevos solo con
intentarlo.
También tienen una gran capacidad para cuestionar, y preguntan
hasta que encuentran una respuesta que los satisface o hasta que se cansan o
hasta que nosotros los adultos los
callamos con alguna excusa.
En cuanto vamos creciendo, perdemos esta capacidad, esto porque
la mayoría de las veces estamos tratando de agradar y se nos olvida dejarnos
llevar por nuestros instintos.
Durante todo el día, sin darnos cuenta, nos hacemos
preguntas y nos las respondemos de manera inconsciente. Y cuando las preguntas
nos las hacemos de manera consciente, podremos lograr cambios importantes en
nuestras vidas y en nuestros días:
-Estoy disfrutando mi trabajo? Que puedo hacer para
mejorarlo y disfrutarlo?
-Soy feliz con lo que he obtenido hasta este momento?
-Que cambios debo hacer para alcanzar mi próxima meta?
-Que debo hacer para invertir mejor mi tiempo y leer un poco
más?
No dejes de preguntarte cosas en tu vida, las preguntas
conscientes tienen poder y te ayudaran a encontrar tu camino, a construir tu universo.